Qué son los microelementos y por qué son esenciales para las plantas
Los microelementos son nutrientes minerales que, aunque se requieren en pequeñas cantidades, resultan imprescindibles para el desarrollo vegetal.
Entre ellos destacan el hierro (Fe), zinc (Zn), manganeso (Mn), cobre (Cu), boro (B), molibdeno (Mo) y calcio (Ca).
Cada uno cumple una función clave en los procesos fisiológicos de la planta:
- El hierro participa en la formación de clorofila y evita la clorosis férrica.
- El zinc interviene en la síntesis de proteínas y en la regulación del crecimiento.
- El calcio refuerza la pared celular y mejora la firmeza del fruto.
- El manganeso activa enzimas que favorecen la fotosíntesis y la respiración celular.
Una deficiencia de cualquiera de estos elementos puede reducir el rendimiento, la floración o la calidad del fruto, por lo que su aporte controlado es fundamental.
Fertilizantes con microelementos: función y beneficios agronómicos
Los fertilizantes con microelementos ayudan a mantener el equilibrio nutricional del cultivo y a prevenir carencias invisibles que afectan la productividad.
Sus principales beneficios son:
- Prevención y corrección de deficiencias específicas según el tipo de suelo y cultivo.
- Mejora de la fotosíntesis y del metabolismo energético.
- Aumento del vigor vegetativo y de la resistencia al estrés (frío, sequía o salinidad).
- Optimización de la floración y el cuajado de frutos.
- Mejor calidad y conservación poscosecha.
Además, las formulaciones modernas permiten la aplicación foliar o radicular, garantizando una absorción rápida y eficiente, sin riesgo de fitotoxicidad.
Microelementos foliares y complejados: eficacia y movilidad
Las formulaciones de microelementos complejados o quelatados mejoran la estabilidad del nutriente y su movilidad dentro de la planta.
Esto es especialmente útil en suelos calcáreos o con pH alto, donde la disponibilidad natural de micronutrientes se ve reducida.
- Los microelementos foliares proporcionan una respuesta inmediata al aplicarse directamente sobre el tejido vegetal.
- El calcio complejado, por ejemplo, es esencial para la firmeza del fruto y la prevención de fisiopatías como el “blossom end rot” en tomate o pimiento.
- El zinc quelatado y el hierro complejado favorecen un crecimiento equilibrado, hojas más verdes y una fotosíntesis eficiente.
Entre las soluciones destacadas de ARTAL se encuentran:
- Flowal Ca: calcio complejado de alta asimilación.
- Flowal Fe: hierro complejado para prevenir clorosis férrica.
- Flowal Zn: zinc quelatado que estimula el crecimiento y la brotación.
Cómo elegir el microelemento adecuado según el cultivo y el suelo
La elección del microelemento depende de las condiciones del terreno y de los síntomas observados:
- Calcio (Ca): fortalece los tejidos, mejora la conservación y la vida útil del fruto.
- Hierro (Fe): corrige la clorosis en suelos calcáreos.
- Zinc (Zn): promueve la elongación celular y el desarrollo de hojas jóvenes.
- Manganeso (Mn): estimula la actividad enzimática y la fotosíntesis.
Combinar varios microelementos en un programa de nutrición equilibrado permite aumentar el rendimiento y la calidad comercial de los cultivos.